Que facilidad se tiene
para criticar, sin conocimiento de causa
He
leído hace poco publicado en un medio de comunicación local, que dirige como
Presidente de la Asociación, el personal de confianza de un grupo municipal
alcalareño, una crítica destructiva hacia nuestro Auditorio Riberas del
Guadaíra. Solo hace falta, un poco de profesionalidad por ambas partes, quien
lo manda y quien lo publica, de poner negro sobre blanco, la gran realidad y no
lanzar bulos que no sólo dan para falsos testimonios, y tirar por tierra a unos
grandes profesionales y un gran Auditorio como el que muchos alcalareños,
disfrutamos cada vez que hay algún evento dentro de su amplia y trabajada
programación anual.
No vale con lanzar meros
titulares de prensa, sino asistir y presenciar algún evento para después lanzar
cuantos comentarios crean necesarios y oportunos. Es triste leer, y más triste
de donde procede, noticias con escaso argumentos como para definir lo que
tenemos y disfrutamos los alcalareños, que vuelvo a reiterar, asistimos con
bastante frecuencia. Nunca he visto ni la asistencia de Lola Aquino, a la
postre portavoz del grupo municipal AxSí, ni de su asesor Christopher Rivas, a
la postre Presidente de la Asociación editora del medio, por algún evento
que se viene realizando a lo largo del año.
Desde una humilde opinión, creo
que es de recibo, rectificar, y que cuenten la realidad de todo un gran
Auditorio y de la magnífica programación con la que todos los años venimos
asistiendo. Cueste lo que cueste, tanto para el Ayuntamiento, de la que forman
parte, es necesario que la ciudad cuente con estas grandes infraestructuras
culturales.
Estimada Lola, si de verdad usted
y su grupo “Apuesta por Alcalá”, haciendo uso de uno de los eslogan de su
antiguo PA, rectifique y cuando crea necesario puede asistir algún evento
o espectáculo y comprobar que poca razón lleva. Como eterna opositora, sus
mismos gestos le caerán por su propio peso.
Es de bien nacido, el ser
agradecido, y agradezca personalmente la gran labor y planificación que los
profesionales del Riberas del Guadaíra realizan para que Alcalá sea el centro
de las grandes compañías.
Alejandro Calderón Sánchez